Gritos detrás del silencio: Un violador en tu camino

        Gritos detrás del silencio:

       Un violador en tu camino

            Angie Martínez

En la actualidad se dice que los medios de comunicación están a favor de la igualdad pero en realidad al mismo tiempo se transmiten comportamientos misóginos que son dignos de algún castigo, en las noticias de medios mexicanos se dicen frases como "todo parece indicar que fue un crimen pasional", los asesinos no son los culpables de la violencia contra las mujeres, sino que las caracterizan como "violencia doméstica", en donde se desenfoca y no se señala con el dedo al hombre que mata.

Un claro y resonado ejemplo en México fue el asesinato de Mara Castilla, la joven de Puebla que tomó un Cabify y fue violada por el chofer para después ser asesinada con toda premeditación, alevosía y ventaja, este caso reveló el alarmante retroceso de la opinión pública conservadora que condenó a la joven por regresar ebria a su hogar de madrugada: "La tonta se expuso, se lo buscó", "¿qué no vió cómo está el país, cómo está todo?", "fue una idiota", "ve cómo iba vestida", leíamos en las redes.

En la mayoría de los casos las mujeres simplemente "mueren", no son "asesinadas"; quien comete un delito es un delincuente, pero nunca encontraremos esta palabra en una información sobre violencia masculina. Se evita la palabra "asesino" para utilizar "hombre". Y en contra de la ética periodística, se identifica en muchísimas más ocasiones a la víctima que al asesino.

Este tiempo ablanda, pero también tuerce los significados. A través de los símbolos interiorizamos muchas cosas, casi siempre de manera inconsciente.

Feminismo chileno

Debido a este hartazgo que también se presenta en el país de Chile, a finales de noviembre de 2019, entre marchas y protestas, las feministas chilenas salieron una vez más a las calles para poner el grito en el cielo y condenar la violencia en contra de las mujeres. Entre diversas manifestaciones se presentó en Valparaíso el performance del Colectivo Lastesis titulado "Un violador en tu camino" que se puede entender de manera clara y efectiva como el resumen de las décadas del movimiento feminista en Chile. Consiguiendo una puesta en escena masiva, logrando traducir el mensaje de analizar la realidad y denunciar.

El descontento silencioso transformado

El silencio ha sido transformado en cánticos, en gritos, marchas de multitudes que sostienen pancartas. Ocupando regiones, ciudades, países enteros llenos de enojo pero también de alegría por saber que no son pocos, sino miles o incluso millones que exigen un cambio.

Las mujeres ya se cansaron de la injusticia que se vive diariamente y con el performance de "Un violador en tu camino", se realiza un ejercicio presentado como protesta y se administraron perfectamente los medios y formatos comunicativos para presentar la propuesta feminista. A través de las redes sociales se difundió la primera presentación que realizaron en noviembre y después convocaron las siguientes presentaciones y después el resto de las feministas alrededor del mundo se identificaron con el mensaje y se autoconvocaron para realizar el mismo performance.

El significado del himno

La letra del canto introduce partes de acusación, que demuestran lo encarnado que está el sistema patriarcal en las instituciones y cómo éstas en su conjunto, son opresoras de las mujeres. Es el estado y la familia (siendo en esta última, todos los machos violadores). La violencia en contra de las mujeres no se determina por el código genético, constituye en realidad una enfermedad de "transmisión social". Y esto se da por la enorme significación de la presencia de esta violencia en el contexto familiar, que es el núcleo de la socialización. Es significativo ya que apela a todos los hombres heterosexuales para que revisen su relación de poder con las mujeres, para que observen la construcción de su masculinidad y sean conscientes en deconstruirla en función de cuánto o de qué manera pueden violentar a las mujeres con las que se relacionan. Esto mismo es lo que ha incomodado a tantos hombres y la que ha llevado a reaccionar en forma de burla. Cuando hablamos de impunidad, pero sobre todo, cuando afirmamos que el feminicidio es un crimen de Estado, estamos diciendo que éste realiza una acción directa: ya sea en la obstaculización de justicia, o en las actitudes de discriminación hacia los casos de mujeres asesinadas. Pero la acción va más allá: en la desaparición de pruebas, en la manipulación de datos, en el sesgo que tomas sus propias investigaciones y esto es algo muy evidente que sucede en América Latina.

Es curioso cómo se utiliza el juego de los tiempos verbales en la letra: "El violador eras tú, eres tú" en donde se alude al pasado con la primera y se caracteriza como algo histórico pero como se ha mantenido la desigualdad, las mujeres seguimos sufriendo la opresión actualmente, en el presente.

Este performance tuvo un impacto global y a pesar de que se realizó en el contexto de Chile, el alcance fue universal. Porque el patriarcado es una amenaza con la violación en  todas las mujeres del mundo, sin importar la clase social, su nivel de educación o su color de piel y todas han tenido alguna experiencia de violencia, abuso o agresión sexual. Las mujeres ya están cansadas de salir a la calle con miedo, de tener que cuidar lo que se ponen para vestir, de tener que "darse a respetar" en lugar de ser respetadas por el simple hecho de ser personas.

Sin embargo, cuando hablamos de feminicidios en América Latina, estamos hablando de una impunidad que pasa por alto el hecho de que sigan ocurriendo los asesinatos de mujeres sin que los asesinos reciban un castigo. Por eso son tan reconocibles las palabras de este canto para las mujeres, por eso es que se apropian y cobran vida al circular por las redes sociales con ejemplos de los casos que ocurren diariamente.

El performance y las reacciones que tuvo la sociedad nos recuerda que el patriarcado sigue siendo vigente y que la revolución tendrá que ser feminista o no será, que los cambios sociales también son con mujeres y que la justicia no tiene medida.

Las mujeres han estado desde hace mucho tiempo denunciando la violencia de género, las desigualdades laborales, abogando por un aborto legal, libre y gratuito, exigiendo una educación que no sea sexista, por la destrucción de un sistema patriarcal y capitalista que  desplaza e invisibiliza las creencias y prácticas feministas. Tenemos demasiado que aportar al instalar este nuevo pensamiento equitativo, respetuoso de diversidades, creando oportunidades en estas rebeliones sociales en donde las mujeres se levantan y practican la sororidad. Marchando juntas compartiendo un mismo objetivo. Desde distintos colectivos feministas nos protegemos y mostramos nuestra lucha gritando:

"Y la culpa no era mía,

ni dónde estaba,

ni cómo vestía,

el violador eres tú"

Las mujeres y disidencias sexuales cantamos al unísono, haciendo eco, en la lucha que día a día intensificamos. Saliendo a las calles para alzar la voz y exigir los derechos que nos corresponden. Aquí ya ninguna se rinde, ninguna se calla y tampoco a ninguna se olvida.

#1204

Equipo Angie y Sofía

Referencias:

El país. (2019). La letra de "El violador eres tú", el himno feminista que se extiende por el mundo. Sitio Web: https://elpais.com/sociedad/2019/12/07actualidad