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  MI TURNO de hablar La narrativa feminista que todos debemos escuchar ¡Justicia, justicia, justicia! suenan los cantos e himnos feministas ...

 


MI TURNO de hablar

La narrativa feminista que todos debemos escuchar


¡Justicia, justicia, justicia! suenan los cantos e himnos feministas por las calles de toda latinoamérica. Argentina, Chile, Colombia y México, por algunos a mencionar, se unen bajo una misma voz con la intención de romper un silencio generacional. El objetivo no es sino resignificar la narrativa vigente en relación con las dinámicas de poder alrededor del tema de género, en donde las mujeres toman la palabra y dan a conocer su testimonio a manera de lograr inspirar y empoderar a todas las demás víctimas a hablar, denunciar y exigir justicia. No son palabras al aire y al contrario, representan una cantidad de exigencias cuya justificación encontramos en un sinfín de historias y vivencias.

Calladita no me veo más bonita, el ‘Yo también’ es global

‘Me Too’ hace su primera aparición en el año 2006 dentro de la entonces popular plataforma de MySpace, en donde la activista Tarana Burke tenía la intención de promover un espacio de empoderamiento de mujeres y niñas a través de la empatía, aludiendo a las víctimas de abuso sexual y tomando especial enfoque en las comunidades de minoría. Ahora bien, no es sino hasta el año 2017 cuando el movimiento #MeToo es disparado a través de redes sociales con el antecedente de un reportaje en el periódico The New York Times con una ola de acusaciones en contra del productor cinematográfico Harvey Weinstein. Es entonces cuando la actriz Alyssa Milano publica un tuit en el cual hace un llamado a las víctimas de acoso sexual a replicar el hashtag y pronunciar su historia.





La cantidad de respuestas logró la viralización del problema, y no solo eso, sino asimismo posibilitar trasladar el movimiento “from empathy to awareness” (25) ofreciendo una visualización a la dimensión del problema respecto a la cantidad de respuestas recibidas. Más aún, la relevancia recae también en el alcance internacional que adoptó y que por supuesto llegó a tocar suelo mexicano y adaptarse al contexto nacional.

En el año 2018, la periodista Carmen Aristegui presenta una serie de entrevistas dentro de las cuales participan personalidades tales como Karla Souza, Stephanie Sigman y Paola Nuñez declarando sus experiencias en relación con el acoso. No obstante, fue hasta el año 2019 cuando el movimiento toma especial relevancia en el país con mujeres de todos los rincones de la ciudad saliendo a tomar las calles en protesta tras el caso de la joven de 17 años que denunció haber sido violada por cuatro policías.

La Red como espacio de protesta

De repente fue claro que el movimiento #MeToo no sólo incorporaba a celebridades ni a personalidades con un cierto nivel de fama, y que en realidad representaba un lenguaje simbólico de unión a través de un mismo sentimiento, es decir, la búsqueda de la justicia y de un cambio social necesario en el contexto nacional. Ante ello, se involucraban en el movimiento mujeres, niñas y familiares de diversos sectores laborales y geográficos, siendo las redes sociales en este sentido, la herramienta por excelencia para lograr posicionar las problemáticas del acoso y abuso sexual, así como los feminicidios, dentro de la agenda mediática actual generando ruido y multitud. 

Sin embargo, debemos tener presente la consideración de que las redes sociales pueden representar una arma de doble filo, y mientras que por un lado propician la libertad de expresión, por otro también es permisible la violencia a través de la intolerancia y el totalitarismo que conforman nuestra complexión cultural. Es así, como al momento de las mujeres publicar sus testimonios de acoso, también como respuesta existían aquellos comentarios que recurrían a la violencia digital desacreditando a la víctima, insultándole e incluso poniendo en riesgo la misma vida de la persona, es decir, los #haters.



El anonimato fue una respuesta a estos actos, que al respecto, para muchos juega un rol contradictorio en el ámbito de la legalidad, ya que puede llegar a obstruir el debido proceso de una denuncia. Ante ello, la respuesta ha constado de una reiteración ante la desconfianza de los organismos públicos incapaces de responder de forma adecuada a las exigencias de los casos, y que en muchas ocasiones  lleva a las mujeres a buscar justicia por otros medios (Medina, Julieta, & Namnum, 2019).


Un paso a la vez en el terreno simbólico (Marcha 8M)

“Quiero ser libre y no valiente” se escuchan por todas las calles de la república mexicana en donde un “¡Basta ya!” unánime exige al gobierno la defensa y la justicia de los derechos de la mujer. 

  • Se escuchan en locaciones tan significativas como Ecatepec, lugar con el mayor índice de feminicidios del país en donde se posicionaron ataúdes frente al edificio del ayuntamiento en forma de protesta. 
  • En el estado de Oaxaca, en donde la organización ‘Grupo de Mujeres 8M’ centra su atención en exigir a las autoridades acción respecto a los índices de feminicidio en las localidad.
  • En Guerrero la protesta fue protagonizada por empleadas del Ayuntamiento las cuales acusaron de acoso laboral a varios de sus compañeros de trabajo.

El movimiento de #MeToo y todo lo que ello detonó en el contexto mexicano representa “[an] Unprecedent historic moment…for the debates it has triggered” (Botti, Corsi, & Garraio, 2019, pág. 47) en donde se responde a las distintas agendas, eventos culturales y tradiciones, y del cual México no es una excepción. La marcha anual de 8 de Marzo se presenta como una forma de unificar todas aquellas voces y hacer uso de los espacios simbólicos nacionales como es el Ángel de la Independencia y el Zócalo refiriendose a zonas de la Ciudad de México, para voltear a ver la tan latente problemática ¡Nos escucharán! La apropiación del movimiento al contexto inmediato pudo verse trasladado en las variantes del hashtag como son #YaEstuvo y #NiUnaMas acompañados de demostraciones como es el caso de la canción y coreografía ‘El violador eres tú’ proveniente de Chile y adaptado al espacio mexicano.




Es más, el debate puede extenderse a cuestionamientos de vandalismo durante la marcha 8M, y en donde se pone a prueba la responsabilidad de los medios para cubrir el verdadero trasfondo de la marcha y su objetivo. Un medio redacta ‘No es vandalismo, se llama iconoclasia ¿Por qué se criminaliza a la marcha feminista?’ la cual invitamos a la audiencia a leer.

#MeToo sirvió como parteaguas gracias al impulso que tuvo a través de las redes sociales para otorgar voz a todas aquellas mujeres que por otro medio no tenían la oportunidad de contar su historia y comprender que no estaban solas. Consecuentemente se fue moldeando a las necesidades y problemáticas específicas de cada región, y en donde un país como es México, en el cual diariamente se registran 10 feminicidios diarios, la narrativa exigía ser apropiada. En la actualidad, podemos ser testigos y partícipes de este movimiento que logra evolucionar con la población demostrando un cambio de consciencia para el replanteamiento de un nuevo discurso de equidad en nuestro país "It contributed to the creation of a context prone to negociate social change" (Botti, Corsi, & Garraio, 2019, pág. 46).


#1158

Saúl Sánchez, Sara Vivar & Mariana Iglesias


Referencias

Aristegui. (08 de Marzo de 2020). Aristegui Noticias. Obtenido de Los rostros del #MeToo en México: del acoso a la indignación: https://aristeguinoticias.com/0803/mexico/los-rostros-del-metoo-en-mexico-del-acoso-a-la-indignacion/

BBC. (30 de noviembre de 2019). BBC. Obtenido de "El violador eres tú": el potente himno feminista nacido en Chile que resuena en México, Colombia, Francia o España: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-50610467

Botti, F., Corsi, M., & Garraio, J. (2019). THE #METOO SOCIAL MEDIA EFFECT. Bruselas: Foundation for European Progressive Studies.

García, J. (09 de Marzo de 2022). El País. Obtenido de Las mexicanas gritan un masivo “basta ya”: https://elpais.com/mexico/2022-03-09/las-mexicanas-gritan-un-masivo-basta-ya.html

Islas, L. (08 de Marzo de 2022). El Universal. Obtenido de Estadísticas de feminicidios en México 2022. ¿Cuántas mujeres son asesinadas al día?: https://www.unioncdmx.mx/2022/03/08/estadisticas-de-feminicidios-en-mexico-2022-cuantas-mujeres-son-asesinadas-al-dia/

Medina, O., Julieta, V., & Namnum, T. (Julio de 2019). El movimiento #MeToo en México, posturas encontradas. Revista Académica de la Facultad de Derecho de la Universidad La Salle, 287-299. Obtenido de https://repositorio.lasalle.mx/bitstream/handle/lasalle/1418/RA%2033%20Jul2019-287-299.pdf?sequence=1&isAllowed=y

 



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